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Julio 2013 Queridísima Donante: Posiblemente esta carta será toda una sorpresa para ti. La verdad es que hemos decidido escribirte después de largas reflexiones y de pensárnoslo muy bien. El motivo por el que escribimos esta carta es porque queremos darte las gracias. “Gracias” es una palabra que usa muchísima gente y que la mayoría de las veces se utiliza sin pensar. Nuestro “gracias” es diferente. Es un “gracias” que sobrepasa cualquier cosa que podamos expresar en castellano, inglés o cualquier otro idioma. ¿Cómo podemos dar las gracias por el hecho de que, gracias a ti, hayamos recibido el milagro de la vida, el milagro de nuestras hijas que iluminan con su luz todos los días de nuestras vidas? ¿Cómo podemos compartir contigo el que nos hayas devuelto la vida? ¿Que nos regalaste una mejor vida? Nuestros padres te dan las gracias. Nuestros amigos te dan las gracias. Imagínate que antes de recibir el regalo que nos ofreciste durante años luchamos con la infertilidad. Pasamos por seis tratamientos de fecundación in vitro y por infinidad de intentos de inseminación artificial, sin ningún resultado. Seguimos intentándolo incluso después de que los médicos que nos atendían nos aconsejaran que lo dejáramos, que nos rindiéramos. Has de saber que no hay día que no pensemos en tu generosidad, en la persona que hizo posible que volvamos a disfrutar de la vida. Desde el momento de la transferencia de embriones, aquel 1 de abril de 2010, siempre nos has acompañado, has estado presente en nuestros pensamientos y en nuestros corazones. La noche después de la transferencia de embriones supimos, soñamos que tendríamos gemelas. Y así fue. Nueve meses después fuimos bendecidos con nuestras dos maravillosas hijas, B. y M. . Dos años más tarde, después de una transferencia de embriones, de nuevo recibimos el regalo más grande: nació nuestra preciosa hija A. . Son las niñas más bonitas del mundo. Quisieramos que sepas algo más. Quisieramos que sepas que siempre serás bienvenida en nuestra casa, en nuestras vidas y en nuestros corazones. Viendo crecer a las niñas nos damos cuenta de que algún día sabrán su historia. Sabrán cómo llegaron a este mundo. Si estás dispuesta, nos sentiríamos muy honrados de poder presentarte a nuestras niñas. Sería maravilloso poder conocerte y ofrecerles a nuestras hijas una parte de su identidad. Quisieramos invitarte de todo corazón a encontrarte con las niñas y con nosotros. Somos una pareja con mente abierta. Una familia feliz con ganas de conocer a otra gente y de darle la bienvenida en nuestras vidas a todo tipo de personas. Si tienes algún deseo especial, no dudes en decírnoslo. Estamos dispuestos a hacer todo lo que sea necesario. Si nos escribes, por favor hazlo en el idioma que desees porque podremos traducir tu carta. Si deseas que organicemos cualquier cosa, lo haremos. Nos aseguraremos de que la Clínica Eugin siempre tenga nuestros datos de contacto actualizados, disponibles para ti. Prometemos cuidar bien a nuestras niñas. Prometemos honrarte a través de ellas, en todo lo que hacemos. Te queremos, aunque no te conozcamos. De todo corazón te deseamos paz. Te deseamos amor. Y, por encima de todo, te deseamos fe, para que creas que has hecho posible que nuestras niñas y nosotros vivamos. Que Dios te bendiga por darnos el milagro de la vida. Gracias. Con todo nuestro amor que surge de lo más profundo de nuestros corazones,
J., E. R., B., M. i A.
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